Las asociaciones mundiales dedicadas a la investigación de riesgo cardiaco han fijado nuevas directrices para la práctica clínica sobre la prevención y el tratamiento de la hipercolesterolemia (colesterol mayor a 200 mg/dl en sangre).
Estas directrices indican lo siguiente:
- Tratamiento más enérgico para bajar el colesterol sanguíneo
- Mejor identificación de los individuos con riesgo de padecer un infarto cardiaco
- Uso del perfil de lípidos para determinar la presencia de niveles elevados de colesterol, en personas sanas se recomienda practicar cada 5 años.
- Las HDL bajas ( menores a 40 mg/dl) se consideran factor de riesgo importante.
- Cambios terapéuticos en el estilo de vida (dieta baja en grasas saturadas, mayor ingesta de fibra, control del peso y aumento de la actividad física).
La determinación del perfil de lípidos en el laboratorio requiere un período de ayuno de 9 a 12 horas. La última ingesta de alimentos (cena) el dia anterior debe ser muy ligera y exenta de grasas.
Los trastornos del colesterol con frecuencia forman parte del síndrome metabólico que incluye factores de riesgo como grasa abdominal excesiva, hipertensión, triglicéridos altos y HDL baja, por lo que es aconsejado también determinar el Indice de Resistencia a la Insulina en estas personas.